I L T M O S E N O R
Francisco Lopo Orge, Cabo del Cuerpo de Seguridad, procesado en la causa número 50 del presente año, como presunto autor de un delito de Sedición Militar, ante V.I. comparece para solicitar la revocación del proceso, dictado por el Juez Instructor esperando de su Autoridad, se dignará revocar dicho auto de procesamiento, teniendo en cuenta los razonamientos siguientes:
En el expresado se acusa al Cabo que suscribe que salió del Cuartel de Asalto a las ordenes del Teniente Sr Gonzalez Campos y estimulados por un grupo de paisanos que les excitaban a desalojar las fuerzas del Ejercito que ocupaban el edificio del Gobierno Civil, haciendo fuego sobre las mismos, pero lo cierto es, que el compareciente no tuvo en el hecho la participación que se le atribuye, y a ello expone las siguientes razones:
Que no es cierto que saliera del Cuartel el día de autos, estimulado por paisanos, y que al hacerlo fue obedeciendo en todo las ordenes de sus superiores, el cual en este caso era el Teniente Sr Gonzalez Campos, que le dijo: «Lopo venga Vd con unos cuantos Guardias», saliendo a cumplimentar dicha orden con el mismo.
Que no es igualmente cierto que se dirigieran al edificio del Gobierno Civil, con intenciones de asaltar el mismo, como se les imputa, puesto que al salir de su alojamiento con el Teniente Campos, no sabían a lo que iban, y al enterarse en la calle por algunos paisanos que el edificio del Gobierno estaba en poder de estos, entonces desviaron su camino que era por la calle de San Francisco, tomando entonces por la por la Villalba Hervás, después de del Sí, para desembocar en la del Castillo, con el fin de poder apreciar mejor lo que sucedía. Que al llegar a la esquina de la Plaza de la Constitución, se pararon todos frente al Café Suizo, estando en actitud espectativa pues observaron que las puertas del Gobierno Civil estaban completamente cerradas, viendo también que en medio de la Plaza, frente al Gobierno havia un compañero tendido en el suelo. Estando en esta actitud, que duró breves momentos, fueron agredidos a tiros desde distintos, viéndose obligados a hacer uso de sus armas para repeler la agresión de que eran objeto y poder retirarse, todo ello siempre en contacto con su Superior el Teniente Sr Gonzalez Campos.
Seguidamente el mencionado Teniente ordenó que entraran todos en el edificio que ocupa el mencionado Café, con objeto desde la azotea poder cooperar con la fuerza del Ejercito, para desalojar de paisanos el edificio del Gobierno Civil.
Una vez que la fuerza del Ejercito irrumpió en la Plaza de la Constitución no se volvió a hacer un solo disparo, pero se vieron sorprendidos al ve r que estas dirigían sus disparos hacia el lugar donde el exponente y sus compañeros se encontraban. Ante la actitud del Ejercito y comprendiendo que padecían un lamentable error, intentaron por varias veces hablar por teléfono a Comandancia Militar, no pudiéndolo conseguir hasta bastante tarde, durante este tiempo, permacieron todos en una habitación. Notando el que relata que el Teniente Sr Gonzalez Campos, no se encontraba ya en la casa. Entonces el que suscribe como mas antiguo ordenó a la fuerza allí presente que se despojasen de sus armas y correajes, para de esta forma poder salir a la calle, lo que todos hicieron, donde les esperaba ya fuerza del Ejercito que les detuvo.
Para mayor abundamiento del que suscribe obró siempre en virtud de obediencia debida, lo demuestra su actuación de horas anteriores,; aproximadamente a las cuatro de la madrugada del día de autos, fue llamado a la oficina por el Sr Capitán, el cual le 1manifestó lo que iba a ocurrir, encargándole que se pasase por Telégrafos y le digese a la fuerza de Seguridad allí de servicio, que se retirase al ver llegar a la fuerza del Ejercito, sin ofrecer resistencia alguna. Igualmente advirtió la retirada de otros servicios. Una vez cumplimentado todo esto, se hizo cargo el que relata de la puerta del Gobierno, por haberse lo ordenado así su Capitán.
Con posterioridad, llegó el Teniente Sr Company haciéndose cargo de estos servicios. Después de hacerse cargo del Gobierno Civil, las fuerzas del Ejército, prestó servicio en la Plaza de la Constitución hasta las 6’30 en que fue relevado por el turno entrante, marchando al alojamiento de la Compañía y constituyéndose de retén, hasta la hora en que ocurrieron los hechos de autos.
Por todo lo expuesto,
S U P L I C A a V.l. que teniendo por presentado este escrito e interpuesto el presente recurso de reposición, contra el auto de fecha veintiséis del actual, en cuanto por él se declara procesado al que suscribe, se digne acordar que dicho procesamiento quede sin efecto, revocándolo en lo que afecta al procesamiento del compareciente, por así de Justicia.
Santa Cruz de Tenerife a 29 de Julio de 1,936.
Francisco Lopo
[Firma rubricada]
Iltmo. Señor Auditor de Guerra de Canarias.
Cfr.: Causa 50 de 1936 [6401-207-1].- Folio 274.